¡Resiliencia y Agilidad es el nombre del nuevo juego que las organizaciones requieren aprender a jugar para sobrevivir y lograr resultados en el 2020!

Uno de los grandes desafíos de manejar la incertidumbre, es el estilo de liderazgo, tal nivel de incertidumbre y lo que pone en riesgo, requieren de integrar la inteligencia emocional al liderazgo, un estilo compasivo, comprensivo, humano, que sabe que está liderando humanos en un momento vulnerable y saber cómo cuidarlos, inspirarlos y comprometerlos es fundamental, reconoce que para lograrlo es indispensable expandir el ser humano que cada líder es, y aprender a reconocer lo que a cada mi miembro del equipo importa, motiva, da sentido, así como expandir esa comprensión a clientes y proveedores para obtener el compromiso que se requiere de cada uno de ellos hacia una agilidad en  la coordinación de acciones, flexibilidad en los procesos, y en la toma de decisiones bajo supuestos flexibles que son mas una pauta de escenarios a seguir para medir, evaluar y poder revertir en caso de ser necesario, que una dirección concreta incuestionable.

Los líderes de hoy requieren crecer al tamaño del desafío, incorporar un liderazgo que expanda su capacidad de gestión bajo escenarios múltiples a ser elegidos conforme los supuestos van variando, ya que hoy acontece en cuestión de días lo que estábamos acostumbrados a evaluar en meses, una capacidad de confiar y delegar en  la toma de decisiones a la que muchos líderes se han resistido por décadas, y hoy es fundamental para adoptar la agilidad que permita navegar a ciegas en un mar turbulento, bajo la estrategia “a prueba y error”, donde la habilidad para aprender ágilmente de cada escenario, será la clave para encontrar la estrategia adecuada que funcione temporalmente durante este periodo incierto, y a la vez, permita adoptar nuevas formas que permanezcan y potencien la agilidad de la organización hacia el futuro.